El cumplimiento de las regulaciones contra el lavado de dinero (AML) es una tarea de creciente complejidad para las pequeñas instituciones financieras. A menudo, estos actores como los bancos comunitarios y las plataformas de criptomonedas enfrentan limitaciones significativas, desde la falta de recursos hasta un acceso restringido a tecnologías de vanguardia. Estas dificultades no solo los hacen vulnerables, sino que también incrementan el riesgo dentro del ecosistema financiero en general. La falta de cumplimiento adecuado puede resultar catastrófica, exponiéndolos a medidas regulatorias severas y elevando su vulnerabilidad a ataques de lavado de dinero.
Desafíos del cumplimiento AML para pequeñas instituciones
Para las pequeñas instituciones financieras, cumplir con las normativas AML efectivamente es como caminar sobre una cuerda floja. Pese a estar sometidas a los mismos estándares que sus homólogos más grandes, deben lidiar con la carga de costos de cumplimiento significativos. La mayoría enfrenta dificultades para acceder a tecnología avanzada de cumplimiento AML y encuentra problemas para reclutar personal experimentado en cumplimientos.
Ejemplo de estas dificultades es el caso de Clear Fork Bank, un modesto banco comunitario que se enfrentó a una orden de cese y desistimiento en octubre de 2024 por sus fallas en AML. Esto resalta una creciente vigilancia de las entidades reguladoras que demuestran que ninguna institución, independientemente de su tamaño, está exenta de las expectativas de cumplimiento.
Manejando la brecha tecnológica y de habilidades
Uno de los obstáculos centrales es el acceso limitado a tecnología de alto nivel. A menudo, las empresas más pequeñas dependen de sistemas obsoletos o procedimientos manuales, lo que las hace más propensas a fallas operativas y brechas regulatorias. Este problema se agudiza por la dificultad de contratar profesionales experimentados en cumplimiento, especialmente en áreas rurales o en etapas iniciales de desarrollo.
La falta de personal capacitado contribuye a evaluaciones de riesgo incompletas y una debida diligencia débil al cliente, una receta para el desastre en un entorno donde el riesgo de lavado de dinero es latente. Es crucial que estas instituciones inviertan en la capacitación y en el reclutamiento para fortalecer sus capacidades de cumplimiento.
Impactos del incumplimiento en el ecosistema financiero
Las consecuencias de un incumplimiento en AML son de largo alcance. Permitir que la actividad ilícita se infiltre sin ser detectada en el sistema financiero pone en riesgo no solo a la institución afectada, sino también a sus pares más grandes y a todo el ecosistema financiero. Transacciones no monitoreadas adecuadamente pueden encontrar su camino hacia instituciones más grandes, que confían en los controles efectivos por parte de las entidades más pequeñas.
En respuesta, las instituciones financieras de mayor tamaño están revisando sus modelos de riesgo y promoviendo una colaboración más activa para mitigar este riesgo sistémico.
Federated Learning: Una solución innovadora
La innovación tecnológica ofrece una posible solución a estos retos. Federated Learning es un enfoque emergente que permite el desarrollo colaborativo de modelos de riesgo sin compartir datos entre instituciones. La empresa Consilient está a la vanguardia en esta tecnología, ayudando a pequeñas instituciones a acceder a modelos AML de alto rendimiento que han sido entrenados colectivamente.
Este modelo ha mostrado una efectividad de detección 4 veces superior y mejoras de eficiencia en un 75%, sin comprometer datos sensibles. A través de esta inteligencia compartida, las instituciones más pequeñas pueden mejorar significativamente sus capacidades de detección y contribuir a la seguridad del sistema en su totalidad.
Reflexiones finales sobre el cumplimiento AML
El fortalecimiento del cumplimiento AML en todos los niveles es vital para la integridad del sistema financiero global. La tolerancia reguladora hacia controles débiles está disminuyendo, por lo que la industria debe evolucionar para enfrentar este desafío colectivamente. La tecnología, la colaboración y la alineación regulatoria son fundamentales para cerrar la brecha de cumplimiento y salvaguardar el ecosistema financiero.
Con un enfoque renovado en la mejora de los recursos tecnológicos y humanos, las pequeñas instituciones pueden no solo cumplir con los requisitos regulatorios, sino también desempeñar un papel activo en la protección del sistema financiero global contra riesgos ilícitos.